EGO/AMOR/MIEDO

Hoy quiero hablarles del miedo y del ego, y de lo perjudicial que es cuando estos aparecen en una relación que está empezando, relación que, sin estos obstáculos, solo pronostica alegría y pasión.

Alguien muy cercano a mi encontró ese tipo de conexión que se consigue tan pocas veces. Hablo de la conexión sexual, intelectual y de esa química que te hace sentir inevitablemente atraído hacia otra persona.

¿Qué paso? Que en el proceso de conocerse, el miedo y el ego los invadió. Al comenzar una relación, rara vez dejamos ver quiénes somos en realidad pues estamos interesados en mostrar nuestra mejor faceta.

Es con el tiempo y la confianza que vamos dejando que esa persona nos conozca de verdad, pero para que esta confianza se construya, uno debe compartir con la otra persona tiempo de calidad, con conversaciones, amaneceres juntos y mensajes constantes que te hagan saber que de verdad le gustas a esa persona.

Cuando alguien nos gusta mucho, es normal que nos dé miedo entregarnos y por eso nos ponemos una coraza que no permite que el otro entre, o lo que es peor, nos ponemos esa máscara que no deja que el otro sepa quién somos y que esperamos de la relación.

Y nos expresamos de maneras equivocadas pues no somos claros con nuestras palabras y esto se debe porque no somos sinceros, sea por miedo a lo que la otra persona pueda pensar o por culpa del ego, que no nos deja reflejar lo que nuestro corazón siente por la angustia que nos produce el vernos vulnerables.

En cuestiones del amor es mejor siempre ser sincero, con nuestros sentimientos y expectativas para no perdernos en el camino y dejar que una conexión perfecta se confunda con algo que no es y así, te pierdas la oportunidad de vivir una historia de amor increíble.

Para abrir nuestro corazón debemos primero dejar los miedos a un lado y soltar al ego que nos hace actuar como alguien que no somos, entendiendo que la única forma en que nos pueden amar de verdad, es amando a la persona que somos en realidad.

Qué importa si piensan que eres un romántico empedernido o un ingenuo que se abre fácil al amor, uno no debe dejar pasar a la ligera a la atracción y menos a ese tipo de conexiones pues son escasas y que vale la pena arriesgarse por ellas.

En lo personal, prefiero vivir con un, "lo viví, funciono o no, pero lo viví" a vivir con un "que hubiera sido". La vida esta para eso, para vivirla y es muy corta como para experimentarla a medias.

Exprime a cada situación y en especial a cada emoción linda que experimentes. No dejes pasar en vano a esa persona que te hace vibrar, a esa persona con la que puedes tomarte unos tragos hasta el amanecer y reír sin parar, a esa persona que puedes sentir de verdad en los momentos de intimidad.

Parte de crecer emocionalmente es ser honestos con lo que sentimos y en ser claros con lo que queremos, dejando las aprensiones que no son más que inseguridades y dejando al ego, que no es más que el mismo miedo que tenemos de sufrir.

Inténtalo, arriésgate por esa conexión, no pierdes nada y si puedes ganar mucho. Además, nunca olvides que la persona correcta no te juzgara ni pensara nada malo, al contrario, amara tu coraje de poder ser tú mismo y de abrirte al amor sin reparos.

¡Feliz día!